De cara a Navidad, la mayoría de los hogares de nuestro país se visten y decorar para la ocasión. Y en esa decoración, no puede faltar el árbol de Navidad.

Aunque el árbol de Navidad es un elemento que algunos consideran imprescindible en la decoración navideña, hemos de indicar que también puede traer consecuencias para nuestra salud. Hablamos del síndrome del árbol de Navidad.

¿Quieres saber qué es el síndrome del árbol de Navidad? ¿A qué se debe esta enfermedad?Te invitamos a seguir leyendo para saber qué es el síndrome del árbol de Navidad y cómo evitarlo.

Qué es el síndrome del árbol de Navidad

Antes de entrar en detalles, vamos a definir qué es el síndrome del árbol de Navidad.

Los árboles de Navidad naturales pueden suponer un problema de salud para muchas personas. Es lo que se conoce como el «Síndrome del árbol de Navidad». Se trata de un tipo de alergia que presenta los algunos de los síntomas propios de la alergia común: ataques de asma, fatiga o congestión nasal.

¿A qué se debe el síndrome del árbol de Navidad? Este síndrome o enfermedad relacionada con el árbol de Navidad está relacionada con el moho que puede aparecer en el árbol, así como el mismo polen del árbol.

Síntomas del síndrome del árbol de Navidad

El síndrome del árbol de Navidad viene acompañado de una serie de síntomas, como congestión nasal, fatiga, ataques de asma, picor de ojos, etcétera. Los síntomas del síndrome del árbol de Navidad coinciden con los síntomas a una alergia común al polen.

Estos síntomas del síndrome del árbol de Navidad pueden aparecer de inmediato, tras colocar el árbol en nuestro hogar o hasta pasadas dos semanas.

Cómo prevenir el síndrome del árbol de Navidad

La mejor forma de prevenir el síndrome del árbol de Navidad es colocar en nuestro hogar un abeto navideño artificial. En el caso de optar por un árbol de Navidad natural, deberemos evitar que aparezca moho en el árbol.

Para evitar que salga moho en el árbol de Navidad natural, se recomienda limpiar el árbol antes de su colocación con una manguera con agua a presión. Tras su limpieza, se recomienda dejar secar el árbol en el garaje o al aire libre, durante al menos siete días, antes de colocarlo en la vivienda.

Una vez colocado en la vivienda, deberemos prestar atención por si aparece moho, durante los siete días siguientes a su colocación. El moho suele aparecer en lugares cálidos con humedad.

Una vez colocado el árbol en el hogar, si sueles presentar síntomas del síndrome del árbol de Navidad, utiliza guantes y ropa que cubra el cuerpo cuando vayas a manipularlo.

Síndrome del árbol de Navidad artificial

Aunque cuando hablamos del síndrome del árbol de Navidad, por lo general nos referimos a los árboles de Navidad naturales, hay quien dice que sufre el síndrome del árbol de Navidad con árboles artificiales.

El síndrome del árbol de Navidad artificial está relacionado con la exposición del árbol a ácaros y polvo. De modo que, si tienes alergia a los ácaros o al polvo, es probable que sientas los mismos síntomas que el síndrome del árbol de Navidad natural, de ahí que se le llame síndrome del árbol de Navidad artificial.

Para evitar el síndrome del árbol de Navidad artificial se recomienda guardar el árbol de un año para otro protegiéndolo del polvo. Guarda tu árbol en un lugar seco y limpia el árbol con un paño húmedo antes de colocarlo en tu hogar.