Scrooge es el personaje principal de la novela de Charles Dickens «Cuento de Navidad«. Sobre él gira una trama de halo misterioso y de terror en algunas partes de la misma, en las que el viejo Scrooge ve su pasado, su presente y su futuro, causado por su forma de ser, su avaricia y su mal caracter.
Pero si hay algo que Scrooge no soporta sobre todas las cosas, es la Navidad. Pero, ¿fue siempre así? ¿Qué llevó a Scrooge a odiar la Navidad?
A lo largo de la historia que se narra en la novela de Dickens se puede conocer las razones por las que a Scrooge no le gusta la Navidad y ello os lo vamos a contar en esta entrada.
¿Por qué Scrooge odia la Navidad?
En la novela Cuentos de Navidad, a Ebenezer Scrooge se le describe como un hombre avaro y egoísta, sin ningún interés en la Navidad ni los festejos que la rodean.
La razón de ello se debe principalmente a cuando era niño. En aquella época Ebenezer veía como los niños disfrutaban de la época navideña mientras que él vivía la Navidad en solitario y de una forma traumática.
Y es que aunque de adulto es un hombre rico y con mucho dinero, Scrooge creció en un ambiente pobre y sin ningún tipo de afecto, lo que le hizo trabajar desde muy joven para poder sobrevivir.
Esto le llevó a valorar el dinero sobre todas las cosas, a tener grandes cantidades dinero guardado para sentirse seguro y a despreciar cualquier celebración que suponga derroche tanto de dinero como de tiempo no «provechoso» para seguir ganando más.
Si a eso le unimos que el amor de su vida, Belle, le abandonó por su obsesión por el dinero, le hizo sentirse aún más aislado y resentido, llevándole a ser el anciano amargado y solitario que no es capaz de disfrutar de las cosas más simples de la vida, incluyendo entre ellas, la Navidad.
Como ves, la razón por la que Scrooge odia la Navidad es su obsesión por el dinero, el ahorro y la riqueza, además de una vida amargada y triste que hace ver a Scrooge la Navidad como una época de despilfarro que debería borrarse del mapa y por nada del mundo sería partícipe de dichos actos.
Pero no nos gustaría poner el punto y final sin dejar claro que, a través de la visita de los tres espíritus de la Navidad, Scrooge aprende a valorar la importancia de la familia, la amistad y el amor, y finalmente, encuentra la felicidad y la redención, disfrutando de las Navidades que le quedaban por vivir.